Wednesday, August 10, 2011

Sin vencedores, sin vencidos, sin justicia.


Oklahoma City. “No entre ahí señora” ordena el soldado; “ahí están mis hijos” dice la mujer. “Ahí solo guerrilleros hay” le dicen, “esos son mis hijos” responde. “Mata a esa vieja” dice otro soldado”. Esa fue la escena luego de un bombardeo en un caserío en El Salvador durante la guerra civil, según la recuerda la madre de las victimas. “Como va a creer que uno va a venir a recoger a sus hijos en pedacitos”, pregunta la mujer al periodista que la entrevista.

La guerra civil en El Salvador duro 12 años, murieron 80 mil personas. En 1992, en Chapultepeque México, se firmaron los acuerdos de paz entre el gobierno de la conservadora Alianza Republicana Nacionalista ARENA y la entonces guerrilla Frente Farabundo Marti para la Liberación Nacional, FMLN. Atrás quedaron los combates, las balas y también las victimas y sus deseos de justicia. Las victimas son de  ambos lados, los que sufrieron por el FMLN y por el ejército nacional.

Durante la guerra ambos lados cometieron atrocidades; se secuestro, se extorsiono, se asesino, se arrazo comunidades a bombazos y se murió en combate rural o en ciudad. Dentro de lo “ético” de la guerra se encuentran las muertes en combate. Pero incluso dentro de la guerra hay atrocidades que son “ilegales”, son los crímenes de guerra y de “lesa humanidad”. En corto: Trato inhumano y tortura. Además, asesinato, violación, bombardeo y/o destrucción de pueblos sin defensa y saqueo no justificado por necesidad militar. Ambas partes, guerrilla y ejército cometieron  de estos crímenes.

Las hostilidades finalizaron en diciembre 31 de 1991. La guerra termino en empate militar. Sin vencedores ni vencidos. A sin vencedores ni vencidos añadiría, por consecuencia lógica, también sin justicia. Entre 1992 y  93 se aprueban dos leyes que otorgan Amnistía “amplia, absoluta e incondicional, a favor de todas las personas que en cualquier forma hayan participado en hechos delictivos.” Aplico a ambos lados.

Si bien el FMLN no tenia diputados en la asamblea legislativa que aprobó dicha leyes, intuyo que sabia de esto desde que negociaban la paz. Fue un acuerdo entre beligerantes que fueron también victimarios. Esta ley es un acuerdo que hizo implementable la reforma política en el país, pero en la que se olvido a las Victimas.

Esta semana, 9 militares de la cúpula militar de finales de la guerra están bajo custodia bajo la posibilidad de  extradición a España  acusados de la muerte de 6 sacerdotes jesuitas. Con esto cobran fuerza las voces que piden derogar la ley de amnistía. Es la rebelión de las victimas, como la mujer que recogió en pedacitos a sus hijos. Son los  piden con mas legitimidad que nadie su derogación y justicia pues fue un acuerdo entre victimarios. Las consideraciones: ¿es esto posible y/o conveniente en este momento?  Eso es tema de otra columna.

2 comments:

pedro jose said...

¿Justicia? , En el Salvador,Muy pocos puede reclamarla

pedro jose said...

¿Justicia? Muy pocos puede reclamarla